lunes, 2 de noviembre de 2009

ACADEMIAS PRE-UNIVERSITARIAS, ¿UN MAL NECESARIO?


No es novedad que durante los meses de la segunda mitad del año muchos de los alumnos que cursan el quinto año de secundaria, se matriculen en diversas academias o en centros preuniversitarios con una sola finalidad, prepararse para los exámenes de admisión y asegurar su ingreso a la universidad. Como en cualquier centro educativo, el alumno asiste para aprender e incrementar sus conocimientos, lo cual es sin duda algo totalmente beneficioso para cualquier persona. Sin embargo, para la gran mayoría, este beneficio trae a la vez una serie de situaciones que afectan el rendimiento académico de quienes han optado por estudiar en estos centros.
Una de las cosas que se ven más afectadas por esto es el descanso. No bien toca el timbre de salida, estos estudiantes tienen que salir con mucha prisa para poder llegar a tiempo a sus respectivas academias. Luego de varias horas, regresan a sus casas para hacer, no sólo tareas del colegio, sino también de la academia e incluso repasar y estudiar los temas que han aprendido, lo cual implica permanecer despiertos hasta altas horas de la noche. El no dormir lo suficiente, genera un debilitamiento tanto físico como mental, por lo que es bastante común ver en las aulas de clases alumnos con rostros somnolientos y que inclusive duermen mientras se dictan las clases.
La preocupación por tener buenos resultados en la academia o “pre” y también de cumplir con las asignaciones y trabajos del colegio, hace que dichos escolares ejerzan una presión sobre sí mismos y se exijan esforzarse más. Todo esto, aumentada la falta de reposo, puede generarles estrés, que puede ser muy perjudicial si llega a agravarse. En ciertos casos, a pesar del cansancio y la fatiga los estudiantes pueden mantener un promedio de notas aceptable. No obstante, hay quienes se concentran únicamente en rendir en su academia o centro preuniversitario, y descuidan por completo el colegio. Es por esto que en el segundo semestre el rendimiento de todo el grado en general es inferior al del anterior.
En este tema no se necesitan buscar culpables, sino formas de que este problema sea menos grave en los próximos años, y que no seas algo perjudicial para quienes necesiten inscribirse en este tipo de institutos. En cuanto a alumnos, son ellos quienes deben aprender a organizar mejor su tiempo, ya sea mediante la creación de horiarios o cualquier otro método. Tomar conciencia de que por más que el hecho de aprobar la academia o la “pre” les asegure el ingreso a la universidad, son las notas del colegio las que dan validez a esta admisión.
Por parte del colegio, sería conveniente que el plan de estudios durante el quinto año o incluso desde el cuarto año, abarque temas propios de los exámenes de admisión, para así descartar la necesidad de inscribirse a estos centros alternativos. De no ser posible esto en un corto plazo, se debería tomar en cuenta esta situación y así evitar sobrecargar a los alumnos de tareas entre los días laborales, para que así el tiempo que ocupa hacer tareas se sitúe en los fines de semana.

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